UN COMENTARIO QUE BIEN VALE UN POST

La condesa de Estraza dijo...
Esta foto me produce una profunda tristeza, insuperable, y mucho tiene que ver el marco en el que está realizada, Casa Patas, aquel templo de pureza flamenca hoy prostituido por auténticos mamarrachos como es el patético residuo de la Asociación el Toro de Madrid que semana a semana se nos viene enseñando en fotos desde diferente sitios de la red en una de las sacrosantas aulas de la Fundación.
Vaya tres, el pijito ganadero de turno, enfundador y demagogo, más el chufla del Salamanca mirando a cámara con ojos tipo galán barato como amenazando al personal anonadado que comienza a no dar crédito a lo que ve.
Luego viene el señor conde de Estradas, siempre de tercerolo, impecablemente vestido para la actuación, como el inolvidable Molleja, intentando guardar el tipo como protagonista de una situación que no se sostiene.
¿Qué tipo guardará? Si la Asociación el Toro de Madrid es un cadaver que atufa y el corrupto aristócrata un personaje completamente quemado entre la afición seria de Madrid. Ande, su excelencia, tápase, que es mucho más elegante y se requiere a veces más hombría y valor para permanecer en un segundo plano que para imponernos su insoportable presencia haciendo el más completo de los ridículo para recochineo general, con esa cara de tristeza
-interna- que usted viene mostrando, mueca que estoy segura que le acompañará y así lo deseo hasta la mismísima tumba.
Caballero, sigo con avería, de okupa en ordenadores de otros ando picoteando, así que en cuanto la técnica me lo permita y remate la entrada que tengo pendiente en mi blog así como la edición de algún comentario retenido debido a las circunstancias, trataré el tema Casa Patas con estos horteras dentro. ¡Qué abigarrada y excesiva decoración en tan mágnifico e intocable espacio con esos cartelones repititivos de pésimo gusto!, ¿quién lo permite?, ummm, tanto por hablar... Vaya gol payo, señora o señorita Begoña F. Pellicer.

La condesa de Estraza