He leído varios post, artículos y comentarios en diversos blogs y WeBs sobre la admisión a trámite de una propuesta para prohibir o abolir los toros en Catalunya.
Quizá en primer lugar destacar el Articulo de Antolin Castro en Opinión y Toros por mayor difusión y argumentación y sobre todos los demás post por los comentarios el post de Toros Toreros y Afición, aunque hay otros.
Todos tienen una voluntad de contribuir a evitar que tal propuesta prospere, pero todos al argumentar caen en el mismo error se basa en el sentimiento antiespañolista de los catalanes, sentimiento que como tal no existe y que al usarlo lo quiere ser un apoyo se convierte en el mejor aliado de los que pretenden la abolición.
Para entender el sentimiento de los catalanes hasta los de los no nacionalistas no es necesario ser catalán pero si vivir, que no estar un tiempo en Catalunya.
En Catalunya como en todas las regiones o autonomías de España se desarrolla una cultura propia dentro del estado español, más acusada realmente en Catalunya y el País Vasco por contar con un idioma propio vivo y en que fueron los dos territorios españoles que no sufrieron o gozaron del asentamiento de los árabes y su influencia.
En Catalunya ha habido siempre un sentimiento de de defensa de su idioma y de su cultura y los toros y las corridas forman parte de ella, antes y después de la guerra civil, hasta los años 60/70 los toros eran una manifestación cultural tan catalana como, española, francesa, portuguesa o latinoamericana.
Yo soy aficionado y mucho nací en Barcelona en 1.949 de padres catalanes de estirpe y habiendo sufrido en sus propias carnes la guerra civil mis padres eran aficionados al punto de que yo tome más de una vez el pecho en la plaza de toros.
Los catalanes que nacieron antes de la guerra sentían como cultura propia los toros, lo que nacieron después de la posguerra, yo soy una excepción como muchísimos otros que confirma la regla, desarrollaron una sensibilidad antitaurina no por un rechazo a lo español que es lo se viene sosteniendo mayoritariamente fuera de Catalunya, sino por que el franquismo durante toda su existencia los utilizo como una vía mas de la brutal represión a todo lo que fuera catalán.
Por el uso que hizo el franquismo de los toros es porque se despertó un rechazo y un olvido a lo que era una tradición puramente catalana, como española y se produjo porque el franquismo la asimilo a encarcelar a quien hablaba catalán en publico, a quien mantenía sus tradiciones en publico, en hacer obligatorio la compra del emblema de la falange para poder entrar a una corrida de toros, iniciarla con el himno español y detener a quien no se levantaba con el brazo en alto, esto fue lo que provoco la perdida de la raíz de la corrida en los catalanes y su rechazo.
La forma de combatirlo no es acusarlos de anti españoles que no lo son ni que sienten rechazo de lo español porque no lo sentimos, es recordarles que la actuación del franquismo no es la actuación histórica de los españoles, es recordarles y reivindicar que las manifestaciones taurinas son manifestaciones puras y autóctonas de la cultura catalana, en fin lo que se ve año tras año en Ceret y que casi todo el mundo ignora.
Quizá sea tarde o quizá no pero el camino es este el que se tome conciencia en Catalunya de que los toros son una cultura propia compartida con españoles, franceses, portugueses y latino americanos, mientras hagamos lo contrario no haremos mas que agravar el rechazo.
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